miércoles, 20 de enero de 2016

La primera guerra mundial fué causada por un sandwich

El 28 de Junio de 1914, siete conspiradores serbios tenían la tarea de matar al querido archiduque. A las 10:15 horas de la mañana, el cortejo de seis vehículos pasó ante el primer miembro del grupo, Mehmedbašić, que intentó apuntar desde la ventana de un piso alto, aunque no logra obtener un buen ángulo de tiro, decidiendo no disparar para no comprometer el éxito de la misión. El segundo miembro, Nedeljko Čabrinović , arrojó una bomba contra el vehículo del archiduque, pero falló el lanzamiento: Francisco Fernando, que recogió la bomba con sus propias manos, la lanzó fuera del vehículo; la explosión destruyó al vehículo que estaba atras del vehículo del archiduque, hiriendo gravemente a los pasajeros del mismo, así como a un policía y a parte del gentío de espectadores. Čabrinović tragó su cápsula de cianuro y se arrojó al río Miljacka. La caravana de vehículos se dirigió hacia el Ayuntamiento de la ciudad, mientras que la muchedumbre se dispersaba debido al momento de pánico. La policía sacó a Čabrinović del río, y éste fue fuertemente golpeado por el público antes de ser puesto bajo custodia policial. La cápsula de cianuro que había ingerido estaba caducada o bien tenía una muy escasa concentración de veneno, por lo que no había producido el efecto esperado. Por otra parte, contra lo que él esperaba, el río sólo tenía entonces 10 cm de profundidad, siendo pues imposible intentar el ahogamiento. Respecto de otros componentes del grupo terrorista, algunos huyen al oír la explosión, presumiendo que el archiduque ha sido asesinado. El resto de los conspiradores no tuvo oportunidad de actuar debido a los movimientos de la muchedumbre, y el atentado estaba a punto, pues, de resultar un estrepitoso fracaso.

Hasta que....el archiduque decidió visitar a las víctimas de la bomba, mientras uno de los conspiradores, Gavrilo Princip, como que le dio hambre. Y AHI SE FUE POR SU BUEN SANDWICH. Sí no hubiera ido por ese sandwich, sí se hubiera aguantado el hambre o por el contrario hubiera escogido un hotdog o yo que se, una dona...no hubiera visto al auto del archiduque pasar por los alrededores y no hubiera corrido hasta alcanzarlo y disparar dos balas que dieron por muerto al archiduque Francisco Fernando.

Este hecho es la muestra que las cosas simples de la vida son las que hacen la diferencia. Que nada es lo que uno se espera.

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